En dado caso de que encuentres molesto la palabra “estúpida” en el título, te sugiero que no leas esta entrada, si te sientes agredido u ofendido este es el momento que te retires. Y que no hagas ningún berrinche, simplemente mejor salta esta nota y nos vemos el día de mañana… o sabes que mejor hasta el jueves, por las dudas.
Los ortodoncistas tenemos muchas tradiciones, muchas de ellas simplemente no nos llevan a ningún lado. La megalomanía y narcisismo se ha adueñado de nuestra ciencia, dejando atrás argumentos científicos y apostando por argumentos retóricos, autoritarismo académico y un caudillismo de protagonismo. Teniendo esos antecedentes les presento aquí las discusiones estúpidas que tenemos los ortodoncistas:
1.- ¿Cuál es el mejor torque?
Esta pregunta digna de examen no es más que la interpretación de estudios in-vitro y las experiencias anecdóticas seleccionadas (no de manera aleatoria) por líderes de opinión y casas comerciales. Es más para librarse de problemas y siempre tener a quien vender, la mayoría de las empresas usan ambos. Nuestros estudios in-vitro son buenos, pero son in-vitro. Nos dan una idea de que va a pasar, pero no puede ser que a partir de ellos hagamos un dogma, cuando solo nos deben de servir como un escalón para el siguiente tipo de investigación. El torque en los clásicos estudios in-vitro depende de varios factores, ranura del bracket, grosor del arco, aleación del arco, y probablemente la variable más grande que no creo nos puede dar resultados engañosos en estudios in-vitro, que todos los brackets realmente tengan el torque que dicen y que todos los arcos tengan las aristas talladas de la misma manera.
En pocas palabras, ¿usas 0.022?… genial, ¿usas 0.018?… felicidades.
2.- ¿Cuál es la mejor técnica?
Otra pregunta digna de perdida de tiempo infinito es… ¿cuál es la mejor técnica?. Cada casa comercial defiende la técnica que vende, cada líder opinión defiende la técnica que maneja, cada hardcorefanboyfromhell defiende la secta en la que se encuentra inscrito. Buscar la mejor técnica no solo es perdida de tiempo, es un enorme grito que damos los ortodoncistas, el cual dice “quiero pertenecer a un grupo”. Si tan desesperado estas por pertenecer a un grupo no te sientas para nada solo, los adolescentes están igual que tu.
No te sientas fuera de lugar si no haces una “técnica/filosofía” pura (más racismo no se puede aquí), usa lo mejor que puedas de todos, de todos. Encontraras tu camino conforme pasan los años.
3.- ¿Extracciones o no extracciones?
Nuestras peleas aquí son ya tradiciones, desde la época de Angle, yo soy anti-extraccionista, yo soy extraccionista y así por el estilo. De hecho ahora según las casas comerciales no solo influye si eres partidario de Angle o Tweed, también influye el tipo de bracket que usas ( ternuritas ), con frases dignas de mercado “llévele, llévele sus brackets del autoligado, no usan liguitas, y ya no hará extracciones en pacientes…. llévele, llévele”.
La decisión extracciones no extracciones no van relacionadas con tu “filosofía” y/o “tipo de brackets”, esa decisión la dicta por los valores que trae el paciente.
4.- ¿Cuál es la mejor secuencia de arcos?
“Disculpe doctor, nos podría decir cual es la secuencia de arcos que utiliza?”. Esta pregunta y discusión tiene su lugar en los congresos y eventos, en los cuales se cuestiona la secuencia de arcos que usa el conferencista en turno, que si se salto un arco, que si usa una aleación en particular, que si no termina con arcos de acero 0.021 x 0.025, que si empieza sus casos con un arco que nadie usa.
Y todo esto se adhereza con miles de flash de móviles inteligentes cuando el conferencista saca una diapositiva con su secuencia de arcos. Si tu teléfono fuera realmente inteligente justo en ese momento se auto-destruiría.
5.- ¿Cuál es la mejor cefalometría?
Y aquí oficialmente ya me perdieron, “doctor ¿cuál es la mejor cefalometría que usted usa?. Yo uso Ricketts, yo Steiner, yo McNamara, yo Kim, bla, bla, bla. Actualmente no tenemos ninguna investigación que diga que una es mejor que otra. No la tenemos, lo que tenemos son personajes inclinados (sesgadamente) por el uso de tal o cual cefalometría. Los cuales se van a valer de la falta de conocimientos de los demás para venderles una cefalometría como “el verdadero instrumento de diagnóstico”. Recordemos que es un auxiliar, no instrumento, no decisivo, no mandatorio.
Usa la cefalometría que quieras, una o varias, no me puede eso. Haz tu propia mezcla de ángulos y planos, la cual con tu camino recorrido poco a poco tendrás.
Pensamiento final:
Actualmente ninguna de estas discusiones nos ha dejado algo, más que el simple hecho de terminar estos dramas con frases mediocres como “cada quien hace las cosas como quiere en su consultorio” o “cada quien hace lo que le funciona”. Dichos argumentos no pertenecen a un profesional, no pertenecen a una ciencia clínica. Sin embargo los hemos adoptado y se han enraizado en nuestra profesión, son nuestros “sabios dichos”. Pertenecemos a una generación de ortodoncistas que no puede terminar por darle un tiro de gracia a la ortodoncia. Discusiones como las presentadas aquí merecen pruebas, mejores pruebas, alejadas de la industria y de líderes de opinión patrocinados por empresas. Apuesto a que un día las tendremos.
Nuestras discusiones deben ser fructíferas y no solo un pequeño escenario para egos. ¿Algún día dejaremos de discutir sobre estas cosas?, bueno yo trato de ya no hacerlo (un paso cada día), ¿y tu?.