Hoy en nuestro (infame) jueves de evidencia comparitmos un editorial publicado en nuestra página hermana Ortodoncia Basada en Evidencia llamado El ocaso de las técnicas de autoligado escrito por el Dr. Daniel Segovia. En esta lectura el Dr. Segovia nos comparte su opinión sobre la manera en que nos quiso vender la técnica de autoligado y la realidad de las investigaciones publicadas.
Si bien es solo un editorial, viene acompañado de referencias científicas para el ortodoncista. En un grupo de profesionistas (los ortodoncistas) que nos sentimos tan alejados de la ciencia y tan cercanos al arte, son escritos como este los que nos regresan a nuestras bases, científicas, a favor de nuestros pacientes.
Lametablemente se que a muchos no les gustará, pero lo siento, la ciencia no espera que sus resultados nos gusten o favorezcan nuestras creencias o interpretaciones sesgadas. Varios lectores podrán decirme “hey Orthohacker yo se que usas autoligado ¿qué paso?”, dejaré claro de nuevo este punto, la falta de evidencia no discrimina el autoligado, pero si nos ubica especialmente a la hora de vender este tipo de tratamiento
José Rath dice
Soy ortodoncista hace 35 años, empecé con Edgewise, pase a Straight wire, utilice auto ligados, y no encontré gran diferencia clínica, en los resultados obtenidos, por lo que abandone, rápidamente.
Federico Orozco dice
En mi opinión, la mejor evidencia es la que experimenta el propio ortodoncista en su consulta privada.
Tengo muchos amigos en América Latina quienes creen fielmente (por experiencia clínica de cada uno de ellos) que los brackets autoligables efectivamente son mejores que los gemelares tanto en tiempo de sillón como en el tiempo del tratamiento y los brackets gemelares definitivamente no son ninguna opción en sus consultorios; hay otros que simplemente no les va bien porque creen que usar brackets autoligables es solo cambiar de bracket convencional a autoligable sin considerar que la biomecánica con autoligables permite usar arcos de bajo calibre como .010″ o .012″ (por consiguiente bajas fuerzas) solo por comentar un ejemplo; hay otros que simplemente no les va bien aunque han intentado y también es válido.
No desacredito de ninguna manera las investigaciones científicas ni los resultados que ellas arrojan, de hecho las investigaciones científicas en el área de la neurociencia son parte del fundamento de mi concepto ORTOMARKETING y FACTORNEURO, sin embargo, creo que aún falta mucho para llegar a algo contundente y veraz en el tema de los brackets… por qué digo esto? En la empresa para la que trabajo, cooperamos con universidades en la realización de investigaciones independientes acerca de los productos que manejamos así como la comparación incluso con otros de otras marcas.
Solo por indicar un ejemplo, donamos material para una investigación que curiosamente se repitió en tres universidades y países diferentes, esta investigación en esas tres universidades tenía el exactamente el mismo objetivo e hipótesis, la diferencia entre ellos era la metodología de investigación.
El resultado fue inconsistente entre ellas, cada una mostraba información y conclusiones diferentes (aunque las tres nos favorecían, pero ese no es el punto ahora…) cómo es posible que tres universidades en tres países diferentes y con la misma investigación hayan tenido estos resultados tan dispersos unos de los otros? La conclusión a la que he llegado es justamente lo que indiqué en el párrafo anterior, la metodología de investigación. Cada una ocupaba un equipo y metodología diferente. Esta situación la he visto en varias ocasiones.
Cada vez que me comentan “Federico, no hay evidencia científica que concluya que los brackets autoligables son mejores que los gemelares” mi respuesta es siempre la misma… “No, no la hay, pero los ha probado ya como para tener su experiencia clínica propia?”
En muchas de las investigaciones se utilizan elementos finitos, es bueno como para demostrar características físicas y mecánicas de los sistemas, pero jamás podrá replicarse la parte biológica que juega un papel fundamental.
Aún cuando la evidencia científica nos da indicios e información particular, creo que aún así nunca hay que cerrar las puertas, hay que ser más objetivos y experimentar en la consulta propia. Ese argumento de “No hay evidencia científica que concluya que bla bla bla…” es casi como cuando decimos “No lo como porque me dijo un amigo que no me gustaría, así que no necesito comerlo para probarlo” o incluso con la pregunta que siempre me topo “Federico cómo haces para vivir en Alemania si allá es helado, los alemanes son tan fríos, cuadrados y cerrados” y mi respuesta es “Conoces a algún alemán o has vivido en Alemania?” La respuesta que recibo es “No” …y entonces?
Muchas veces confiamos ciegamente en lo que escuchamos, vemos o leemos sin dar un paso más allá en la propia experimentación… quién sabe, igual y en nuestra experiencia es totalmente lo contrario a lo que se dice.
Es esto un error? responda usted mismo a la pregunta.
Mario dice
Mi estimado Federico, creo que argumentos como “la mejor evidencia es la que experimenta el propio ortodoncista en su consulta privada.” es la gasolina del ortodoncista narcisista, el cual antepone sus experiencias a investigaciones reducidas en sesgo. Ese narcisismo lastimo mucho a la ortodoncia, tanto que actualmente hay generaciones de ortodoncista que no saben leer ciencia y terminan siendo víctimas de “charlatanes” y “pseudocientificos” que por dinero dicen lo que sea.
El argumento de “No hay evidencia científica que concluya que bla bla bla…” no es para que se sientan frustrados, es para que se admitan que necesitamos mejores investigaciones antes de andar presumiendo ventajas que nunca han sido demostradas, y de ahí seguir para adelante, mejorar como ciencia, mejorar como profesionales ya sea que eso les convenga a las empresas que nos venden brackets o no. Los ortodoncistas tenemos una relación simbiótica con las empresas que nos producen productos de calidad, ellos ganan, nosotros ganamos, nuestros pacientes ganan. Pero mucha atención, que la ciencia de la ortodoncia no lleva la agenda de ninguna empresa.
Espero poder verte pronto para platicar en persona, te mando un fuerte abrazo.
Federico Orozco dice
Bueno, no lo llamaría narcisistas,
Dime entonces, con el ejemplo que he expuesto de una misma invistigación con diferentes resultados en tres universidades serias y reconocidas diferentes en países, cuál es la definitiva? Cuál es la contundente? Por cuál de ellas te perfilarías si todas ellas tienen un buen protocolo y equipo usado de primera?
Quiere decir que ni una de ellas es válida?
Estoy totalmente de acuerdo contigo en que es necesario hacer mejores investigaciones… pero… y quién va a calificar cuando una investigación es buena o no? Cuándo llegaremos a ese punto?
No crees que también las experiencias clínicas puedan tener gran valor? No para que a esa persona se pare frente al escenario a difundir subgran descubrimiento, sino para compartir ideas.
Algunas casas comerciales muchas veces sí se exceden en presentar un producto casi como milagroso, eso coincido que no es correcto y es engañoso
Creo que hay mucho que hablar del tema, y quisiera aclarar, cuando yo me refiero a experiencia clínica lo hago en el sentido de lo que a un Dr. le pueda estar funcionando en su consultorio, por ejemplo, un dispositivo desarrollado por él.
Ojo que esta opinión mía dista mucho de tomar como “ley” la experiencia clínica de alguien que se pone a predicar técnicas o filosofías sin un aval científico, ahí estoy absoluta y contundentemente de acuerdo contigo..
Bueno, ya nos encontraremos para tomar una copa y conversar del tema, creo que hay muchas cosas que pueden hacerse al respecto.
Un abrazo.