Recuerdo hace demasiados años, mientras era estudiante de ortodoncia, uno de mis amigos me comentaba, que uno de sus sueños era, ademas de su práctica privada en ortodoncia, que una casa comercial lo buscara y el fuera su conferencista exclusivo. Y la misma historia la he escuchado mil veces de varios camaradas. Por razones del destino las cuales no entiendo, una de las actividades que más pena sola darme (hablar en público), es ahora parte del camino que he decidido caminar.
Ya son unos cuantos años en los cuales he picado piedra en el circuito de conferencistas del mundillo de la ortodoncia, y dentro de mis pros y contras, analizando de manera retrospectiva lo que he hecho, me he dado cuenta de algo, he podido subir y bajar de cuanta plataforma he querido para dar mi mensaje, sin tenerle que vender el trasero a una empresa.
Aunque soy mi propia empresa, Orthohacker. Me he dado cuenta de que no necesito estar con la camiseta de una empresa para poder dar un mensaje a mis colegas. El año pasado dos casas comerciales me invitaron para hablar sobre evidencias en sus eventos, mis camaradas de OrthoClassic y mis camaradas de 3M, yo era el único conferencista independiente en ambos eventos. Y en ambos eventos pude decir absolutamente todo lo que deseaba (aquellos que me han escuchado en vivo saben a lo que me refiero), ya sea que mi voz fuera a favor o en contra de lo que las empresas venden.
Para el mensaje que estoy tratando de llevar a mis colegas ortodoncistas, ser independiente me llega como anillo al dedo (one ring to rule them all). No estoy en contra de los conferencistas patrocinados por empresas, no, no he dicho eso, de hecho varios de ellos son amigos míos, y uno puede aprender mucho de ellos. Y de hecho no podemos dispararnos en nuestro propio pie, le debemos mucho a las empresas. Sin embargo, después de todo este tiempo en que las empresas han podido acomodar entre los primeros lugares de líderes de opinión a personas que claramente tienen conflicto de interés, es momento de ajustar esa balanza, es momento de traer equilibrio a la fuerza (por así decirlo).
Es momento de un nuevo levantamiento de líderes de opinión y conferencistas independientes, los cuales puedan hablar sin tener que “ocultar información no sea que la empresa se enoje”. Ser conferencista es algo que me imagino muy difícil, serlo independiente, es más. Pero la ortodoncia como ciencia lo necesita, nos necesita. Pueden dejar todo en manos de los demas para que ellos lo arreglen, o pueden decidir hacer algo al respecto. ¿Qué hago yo? bueno, digamos que este 2017 haré un poco de ruido, solo un poco.
Dr. Jorge Luis Díaz González dice
El conocimiento , el saber , se pierde si No lo compartimos , e
Un buen maestro experto comparte sobre todo sus errores
Bernardo Ochoa Fernández dice
Tiene toda la razón Doctor .Un gran abrazo. Dr Bernardo
Fernanda dice
Excelente!!!!☺
Ricardo dice
Vaya. Te felicito. Pocos se atreven a decir o mencionar siquiera esto que comentas de los conferencistas pagados
Estamos invadidos de ellos y han perdido objetividad y la confianza de quienes si leen y se preparan de manera seria.
Ellos ( los pagados ) ya no tienen la autoridad ni credibilidad aún y sean “vacas sagradas ”
Son otros tiempos
ROBERTO SILVA M dice
Allá por los 70s, los conferencistas eran independientes y se les invitaba como reconocimiento a su labor profesional, compartían sus experiencias y su paga era el reconocimiento, no había dinero de por medio, ni un contrato ni nada por el estilo.
Actualmente la mayoría son agentes de venta que se presentan al estilo Elvis Presley con presentaciones con alta tecnología y con una clara tendencia hacia un producto o marca comercial.
Anteriormente el gremio odontológico utilizaba las exposiciones comerciales a su favor, ahora vemos que las exposiciones comerciales utilizan al gremio odontológico a su favor.
Que pasaría si las empresas no se involucraran en la academia? No habría dinero para pagar conferencistas? No habría conferencias? Se acabarían los congresos?
Finalmente el beneficio al involucrar casas comerciales para dirigir eventos académicos beneficia a unos cuantos no a la Odontología.
Gladys Azcona Sánchez dice
Muy cierto, ya que en la actualidad las casas comerciales son las que van marcando la forma de trabajar y muestran las innovaciones, aunque no siempre sean benéficas para nuestros pacientes. Aun más las investigaciones y publicaciones de algunas “vacas Sagradas” también son pagadas por fabricantes y compañías internacionales para sesgar investigaciones. Y ¿donde quedaría la evidencia científica si solo se investiga lo que conviene a dichas compañías ?
Arturo Angeles Valdez dice
100%, pero 100% de acuerdo contigo!, hace muchos años lei un editorial de otro ortodoncista viejo, donde hablaba del peligro para la especialidad el hecho de que las compañias fueran las que proporcionaran “conferencistas” por la razon obvia de que estarian cambiando opiniones a favor de sus productos y eso, es sin duda lo que ha pasado. En horabuena tu decision de ser “independiente”
Mario dice
gracias por tu “comentario”
Rick dice
Imagino que 3,años después (ortohacker) sigues pensando de manera similar al repetir el comentario.
La parte que no concuerdo mucho es la de que “les debemos mucho a las casas comerciales”. Ellos no serían nada sin nosotros, y la ortodoncia ancestral se llevaba a cabo con aditamentos “hechizos” que de alguna manera cumplía con sus funciones.
Sigo pensando muy similar, que los fabricantes marcan la pauta y las modas a seguir.
Allá los que se dejen.
Mario dice
creo existe una relación simbiótica, a ellos les favorece, a nosotros nos favorece. Esto es (al menos para mi) exclusivamente en el apartado de producción-diseño-desarollo de material para el ortodoncista, haciendo completamente a un lado que ellos (las empresas) no pueden marcar para donde va el asunto clínico, ese lo marcamos nosotros desde la academia, desde las clínicas. Así lo veo.
Bernardo Ochoa Fernández dice
Un gran abrazo para esta gran familia , tienen mucha razón , los que llevamos muchos años haciendo Ortodoncia en diferentes paises, encontramos estos mismos problemas .En la gran mayoría de los congresos de ahorita no se hace ciencia o se hace poca, son eventos prácticamente comerciales .Ya la industria rige los tratamientos , nos llenan de instrumentos que en mi modesta opinión son un estorbo , Para hacer una buena ortodoncia con tres o cuatro alicates basta . Se olvida el diagnóstico pues con brackets mágicos todo se arreglará para siempre y el nobel así lo aprende , después vienen las desilusiones con las complicaciones correspondientes y el retratamiento que no es más que un tratamiento anterior que fue un fracaso desde el inicio . Vale la pena reflexionar sobre estos temas con frecuencia y hacerlo llegar a las nuevas generaciones de Ortodoncistas que buscan pacientes para sus aparatos y no aparatos para sus pacientes .No todas las filosofías pasadas son malas , ni todas las actuales son tan eficientes como se publica .Un gran abrazo y linda noche para todos . Mi mayor reconocimiento Para ti amigo y hermano Mario,