Lamentablemente vivimos en una sociedad, algo torcida. Ya que aunque muchos de nuestros pacientes, no solo son profesionistas con licenciaturas, sino también con especialidades, maestrías y doctorados, no respetan las “especialidades-maestrías-doctorados” de los demás. Y nos quieren tratar como si en lugar de ir a un postgrado, lo hubiéramos aprendido por correspondencia. A esto, le debemos agregar que muchos dentistas generales que hacen ortodoncia y (lo peor) muchos ortodoncistas no se dan su lugar como profesionales, y aceptan a las mil y un “sugerencias” que el paciente impone. No, no, no, así no se puede trabajar, y mucho menos dar un buen resultado.
En mi humilde (y muchos podrán decir inexperto) punto de vista existen 3 cosas que no se pueden negociar con un paciente, aquí vamos:
El diagnóstico/plan de tratamiento: ¿En serio?, un paciente te va a venir a decir que no es de extracciones, cuando tu diagnóstico te lo dice. Un paciente te va a venir a decir que no es de cirugía, cuando a simple vista se ve. Los diagnóstico y planes de tratamiento no son “negociables”, vaya, cuanto tiempo y noches sin dormir nos costo aprender a hacerlo, como para no respetarlo. Recuerda, que tu consulta de ortodoncia, no es un Burger King.
El presupuesto: Existen muchos pacientes, y padres de pacientes, que sienten que han entrado a “The Price of History” o a una tienda de empeño, y desean negociar tu presupuesto, tu das una cantidad, y ellos dicen menos, pensando que tu te vas a rebajar. No, nada más no. Estoy de acuerdo, que uno puede ayudarles con la manera en que lo van a pagar, darles un poco de más tiempo y facilidades. Pero el precio, jamas. Si quieren pagar menos, siempre existe la opción de algún ortodoncista que rebaja sus precios (ellos mismos le llaman “mercadotecnia”), o algún dentista que quiere jugar a pegar brackets y cobra “solo el material”.
El horario: Todos tienen cosas más importantes que hacer que asistir a sus citas de ortodoncia, ¿verdad?, y al que siempre cancelan es al “buena onda” del ortodoncista, al fin que el ortodoncista es tan “emprendedor” que si se lo pides te vera el sábado en la noche o el domingo en la mañana, vaya no te tienes que preocupar. Actitudes como esa, están llevando a la ortodoncia a la basura, eso no es ser “emprendedor”, eso es no tener respeto por la cantidad de años que estudiaste y por el dinero que tuviste que pagar en un postgrado. Nos cuesta mucho ser ortodoncista, como para no respetar nuestro propio horario. En mi consulta, le digo al pacientes, mi horario es de tal a tal hora, de tal a tal día, si asistes a tiempo a tu consulta ayudara a terminar con buenos resultados y tiempo el tratamiento, si faltas o cancelas, bueno, no te quejes.
No digo, que seas totalitario, existen ocasiones donde puedes ayudar a los pacientes, siempre y cuando no pongas en riesgo la salud del paciente, el buen resultado de un tratamiento, y la justa paga por tus servicios.
RODOLFO dice
EXCELENTE ARTICULO DR. UN ABRAZO.
Rolando Zapata Aristizabal dice
Cordial Saludo desde Medellín Colombia. Completamente de acuerdo con el autor. La ortodoncia es un tema serio. Y es nuestro deber hacerlo ver a los pacientes